10 Ene ¿Cómo actuar en caso de alud?
Hay algunas verdades en montaña: uno, la naturaleza es incontrolable a pesar de las precauciones que tomemos. Y dos: tarde o temprano cometemos errores, aunque seamos expertos. Una vez que tenemos un problema encima, no saber qué hacer puede ser doblemente problemático. Así pues, las técnicas que explica Máximo Murcia en el libro Autorrescate en paredes, glaciares y avalanchas nos darán recursos para afrontar la situación de la manera más eficiente posible. Por ejemplo, en caso de que un alud haya sepultado a un compañero de cordada.
Cómo actuar
La primera medida es asegurarse de que los escaladores no se conviertan también en víctimas, así que hay que valorar si la zona es segura antes de actuar. A partir de aquí, sólo se podrá realizar un rescate eficaz si todos los participantes disponen de un dispositivo emisor/receptor ARVA y si tienen palas y sondas para desenterrar. Sin un ARVA, la posibilidad de rescate depende tan solo de tener mucha suerte y de que la víctima quede solo parcialmente enterrada con algo visible en la superficie; sin una pala con una capacidad operativa razonable, desenterrar una víctima con vida es una tarea casi imposible.
Búsqueda inicial
El ARVA se lleva en la mano en posición horizontal y el rastreo debe comenzar desde el punto aproximado de desaparición. Si la avalancha es estrecha (unos 20 m de ancho, el rango que cubre un receptor), el rastreo lo puede iniciar una sola persona siguiendo el eje de la avalancha. Si es más ancha y solo rastrea una persona, deberá avanzar haciendo eses [ver imagen]; si son dos personas, se seguirá el mismo método, pero repartiéndose cada uno la mitad de la avalancha. Cuando hay varios rescatadores, lo mejor es rastrear en paralelo en sentido longitudinal de la avalancha.
Búsqueda secundaria
Una vez localizada la señal, hay que adoptar el método de búsqueda especificado por el fabricante del dispositivo. Un ARVA de tres antenas informa continuamente de la distancia y dirección de la víctima, así que solo hay que seguirla con el aparato en posición horizontal.
Búsqueda precisa o terciaria
Cuando los rescatadores estén a 2 o 3 metros del lugar de la señal, deben mantener el ARVA a ras de suelo en posición horizontal. El proceso habitual es mover el aparato de forma rectilínea para encontrar en ese segmento un punto intermedio donde la señal indique la máxima proximidad. A partir de ese punto, que deben marcar, se moverán en otro segmento perpendicular para hallar otro punto medio de máxima proximidad, y marcarlo. El área alrededor de esos puntos será donde empezará el sondeo.
Sondeo
Sondear en espiral o en círculos concéntricos. Cada sondeo se distanciará del anterior unos 25 cm. Una vez localizada la víctima con precisión, dejar clavada la sonda en ese lugar a 90º con respecto a la pendiente. Es importante no pisar en la zona para no comprometer las bolsas de aire que hayan podido quedar debajo y puedan ayudar a respirar a la víctima.
Desenterramiento
Palear a lo loco solo consigue desperdiciar tiempo y energía que pueden ser clave para el rescate. Si la sonda indica que la víctima está profunda, lo adecuado es cavar una zanja lo bastante grande para poder movilizarla y, probablemente, darle la vuelta para poder liberar sus vías respiratorias. Hay que empezar a cavar de rodillas, a una distancia de la sonda, hacia abajo de la pendiente, de aproximadamente 1,5 veces la profundidad del enterramiento. Una vez que la zanja tenga una profundidad cercana a 1 metro, avanzar hacia la sonda hasta llegar a la profundidad del accidentado.
Primeros auxilios
Localizada la víctima, lo prioritario es liberar las vías respiratorias antes de desenterrarla por completo. Después hay que desconectar su ARVA (si hay más personas enterradas) o poner todos los aparatos de nuevo en modo emisión. Salvo que esté consciente y e indique que está ilesa, hay que considerarla como un paciente asfixiado, hipotérmico y politraumatizado, así que nunca hay que tirar del cuerpo ni moverlo sin necesidad. Lo adecuado es cavar un agujero grande a su alrededor para liberar a la persona, aislarla de la nieve todo lo posible y abrigarla. A partir de aquí, entran en juego todos los conocimientos de primeros auxilios que tengan los rescatadores y, dependiendo de la gravedad del herido (o si no se ha hecho ya), pedir ayuda a los grupos de socorro.
Funte: Desnivel